«Cuando Hannah compró la antigua casa victoriana, la familia lamentó su estado de deterioro.
Hannah Janickiewicz, madre de tres hijos de Merseyside, Inglaterra, adquirió esta preciosa mansión victoriana en 2013.
Pero su antiguo esplendor se había desvanecido: por fuera, estaba agrietada y en ruinas, y no era aconsejable entrar.
Sin embargo, aunque a la mujer de 41 años le gustaban las renovaciones, sabía que la casa requeriría mucho esfuerzo y dinero, así que dejó el proyecto en pausa por un tiempo.
En 2019, Hanna decidió tomárselo en serio.
La villa estaba en tan mal estado que habría sido más fácil derribarla, pero ella quería restaurarla.
Esto implicó reemplazar toda la instalación sanitaria, volver a colocar los suelos, cambiar las ventanas e incluso rediseñar algunas paredes, y llevó más de seis meses restaurar la estructura exterior.
Hanna tuvo que invertir mucho trabajo, pero constantemente transformó la casa y consideró su diseño.
«Honestamente, era la peor casa de la calle. Quería crear un espacio claro y abierto que pudiera ser utilizado. Me gustaba el aspecto original de la casa y traté de preservar su espíritu y características principales», revela Hannah.
Gracias a la renovación, Hanna convirtió su casa en una joya de la ciudad.
El valor de la mansión aumentó en 216.000 dólares, pero la madre de tres hijos no tiene planes de venderla.»