La receta con consejos y trucos para hacerlos en casa
Tomates secos en aceite
Ingredients
- Tomates San Marzano 1kg
- Vinagre de vino blanco 2 cucharadas
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal fina
- Perejil fresco
- Ajo
Instructions
Paso 1: Primero, lava y seca bien los tomates. Luego córtalos por la mitad a lo largo y colócalos en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino, con el lado cortado hacia arriba. Condimentarlas con un chorrito de aceite de oliva virgen extra y una pizca de sal y cocinar en horno estático a 120°C durante unas 10 horas.
Paso 2: Sabrás que los tomates están listos cuando hayan perdido toda el agua vegetal y la piel aparezca ligeramente curvada: pásalos a un recipiente de cristal o sobre una rejilla y déjalos enfriar por completo.
Paso 3: Mientras tanto, llena un cazo con abundante agua, añade el vinagre y deja hervir.
Paso 4: Luego vierte los tomates secos y escaldalos durante 4 a 5 minutos. Una vez transcurrido el tiempo necesario, escurrirlas y secarlas muy bien con un paño limpio.
Paso 5: Ahora coloca los frascos a esterilizar en una cacerola, llénala con agua fría y déjala hervir durante 30 minutos; después de unos 20 minutos agregue las tapas.
Paso 6: Déjalas enfriar en el agua, luego retíralas con cuidado y escúrrelas boca abajo, colocándolas siempre sobre un paño limpio.
Paso 7: En este punto, pica finamente el perejil y el ajo con un cuchillo.
Paso 8: Disponer los tomates en los frascos esterilizados, alternándolos con la mezcla aromática y el aceite. Continuar hasta 2 cm del borde, presionar bien y cubrir completamente con aceite de oliva. Luego cierre con la tapa y golpee suavemente los frascos sobre una superficie para eliminar las burbujas de aire.
Paso 9: Colócalas en la olla, separándolas con el paño, para que no choquen entre sí. Luego se procede a la pasteurización dejándolas cocer durante 30 minutos desde que hierve. Finalmente, compruebe que se haya formado un vacío presionando en el centro del tapón: si no escucha un “clic-clac”, significa que el procedimiento ha ido bien.
Paso 10: Guarda los tomates secados al sol en aceite durante una semana en un lugar fresco y seco antes de comerlos para darles buen sabor.
Consejo: La forma tradicional de preparar tomates en aceite es secarlos al sol. Para ello, córtelas por la mitad, colóquelas sobre un paño limpio y espolvoréelas con sal, luego colóquelas en el balcón o en el jardín, expuestas al sol, durante 7 a 10 días, dándoles la vuelta después de 4 a 5 días. Una vez secos, hiérvelos durante 2-3 minutos en una solución de agua y vinagre, para eliminar las impurezas, y déjalos secar otros dos días al sol antes de pasarlos a frascos de vidrio.
Si tienes deshidratador, simplemente lava los tomates con cuidado, en este caso preferiblemente dátiles o cherry, córtalos por la mitad y colócalos en las bandejas adecuadas. Condiméntalas con una pizca de sal, pon la secadora a 65°C y déjalas secar durante al menos 24 a 36 horas, teniendo cuidado de revisarlas de vez en cuando. Una vez secos guárdalos en frascos de vidrio.
Si lo deseas, puedes condimentar los tomates secos con los saborizantes que prefieras: albahaca, orégano, tomillo, menta, pimienta o chile, o dejarlos al natural para que sean más versátiles.
Para optimizar tiempos, puedes utilizar tomates ya secos: en este caso sólo necesitarás blanquearlos en agua y vinagre, saltándote el paso de cocción en el horno.
Conservación: Los tomates secos en aceite se pueden conservar unos 3 meses en la despensa, en un lugar seco, alejado de fuentes de luz y calor. Una vez abiertas se pueden conservar en el frigorífico y consumir en un plazo de 3-4 días, asegurándonos de cubrirlas siempre con aceite de oliva virgen extra.