¡Deléitate con la exquisita y suave textura de la mejor mayonesa casera que hayas probado! En esta ocasión, te enseñaré una receta sencilla y rápida para prepararla en licuadora, lo que garantiza una mayonesa perfecta y sin complicaciones. Con ingredientes frescos y fáciles de conseguir, lograremos una delicia culinaria que elevará el sabor de tus comidas a otro nivel.
La mayonesa casera es una opción ideal para acompañar cualquier platillo, desde deliciosas hamburguesas, sándwiches o ensaladas, hasta mariscos y carnes a la parrilla. Su textura cremosa y su equilibrado sabor serán la estrella en tus reuniones y celebraciones, ¡preparando tu paladar para una experiencia gastronómica inolvidable!
No te preocupes si eres principiante en la cocina, esta receta te asegura resultados espectaculares en poco tiempo. La clave para una mayonesa casera perfecta está en la licuadora, lo que garantiza una emulsión homogénea y sin riesgo de que se corte. Sin más preámbulos, ¡vamos a preparar esta maravillosa mayonesa casera!
Cómo preparar Mayonesa casera
Ahora sí estamos listos para crear una mayonesa casera irresistible, que se convertirá en el acompañamiento perfecto para tus platos favoritos. Así que, ¡manos a la obra en la cocina y sorprende a tus comensales con esta delicia hecha en casa!
Ingredientes:
-150 ml de leche bien fría
-1 cucharada de ajo picado
-1 cucharada de cebolla de verdeo picado (cebollín)
-3 hojas de albahaca
-1 cucharada de perejil picado
-350 ml de aceite de soja o de girasol
-1 cucharada de jugo de limón
-1 cucharadita de orégano
-1 cucharadita de condimento completo (puedes usar sal y pimienta al gusto)
Preparación:
- En el vaso de la licuadora, agrega la leche bien fría, el ajo picado, la cebolla de verdeo picada, las hojas de albahaca, el perejil picado, el jugo de limón, el orégano y el condimento completo (o sal y pimienta al gusto).
- Cierra bien la tapa de la licuadora y comienza a batir a baja velocidad para que todos los ingredientes se mezclen adecuadamente.
- Una vez que los ingredientes están bien combinados, mantén la licuadora en funcionamiento a baja velocidad y comienza a verter el aceite de soja de forma lenta y constante. Es importante hacerlo gradualmente para lograr la emulsión adecuada.
- Continúa batiendo hasta que observes que la mezcla adquiere una consistencia espesa y cremosa, similar a la de una mayonesa comercial. Este proceso suele llevar unos minutos, así que ten paciencia y asegúrate de no apresurarte al agregar el aceite.
- Prueba la mayonesa y ajusta el sabor si es necesario. Si prefieres una mayonesa más ácida, puedes agregar un poco más de jugo de limón. Si prefieres más salada o con un toque de picante, ajusta el condimento completo.
- Una vez que la mayonesa casera tiene la textura y el sabor deseados, transfiérela a un frasco o recipiente hermético y guárdala en el refrigerador. Puede conservarse hasta por una semana.
¡Y listo! Ahora tienes una deliciosa mayonesa casera lista para acompañar tus platillos favoritos. Disfrútala con papas fritas, en sándwiches, ensaladas, hamburguesas, carnes asadas, pescados y mucho más. Su versatilidad y sabor incomparable seguramente conquistarán a todos en la mesa.