Paris Jackson, nacida el 3 de abril de 1998 en Beverly Hills, California, es mucho más que la hija del legendario Michael Jackson.
Su historia de vida es un testimonio de su evolución hacia una artista versátil y defensora de diversas causas importantes.
Desde una edad temprana, Paris mostró pasión por el arte, sumergiéndose en la música, la actuación y el modelaje. Su llamativo aspecto la llevó rápidamente a la industria de la moda, donde tuvo éxito como modelo.
Al mismo tiempo, incursionó en el mundo de la música, fundando la banda de folk-rock The Soundflowers y mostrando su talento para el canto y la composición de canciones. La actuación también se convirtió en parte de su repertorio, con roles en series de televisión como «Star» y otros proyectos cinematográficos.
Sin embargo, más allá de sus aspiraciones artísticas, Paris es una firme defensora de la concienciación sobre la salud mental y los derechos LGBTQ+.
Valientemente compartió sus propios problemas de salud mental, ayudando a romper el estigma en torno a estos temas.
Utilizó su plataforma para apoyar a organizaciones dedicadas a la salud mental, la rehabilitación de adicciones y la prevención del suicidio, demostrando así su compromiso con el cambio positivo.
En un reciente episodio de su serie «Unfiltered» en Facebook Watch, Paris presentó a su «hermano mayor» Omer Bhatti y reveló un vínculo profundo del que muchos no sabían nada.
Omer, un bailarín y rapero noruego, explicó que se consideraba a sí mismo como el hermano mayor de los niños Jackson. Él y Paris comparten especialmente un vínculo inquebrantable lleno de amor y apoyo.
La perspectiva única de Omer sobre los hermanos Jackson ofreció valiosas ideas sobre su crecimiento individual y sus personalidades.
Él actuó como una figura guía en la vida de Paris y reflejó el papel de mentor de su padre para Omer mismo. La relación entre ellos ha evolucionado a lo largo de los años, brindando consuelo y apoyo en momentos difíciles.
Esta estructura familiar elegida dentro del clan Jackson muestra el poder de los lazos forjados a través de experiencias compartidas y amor incondicional.
El viaje de Paris Jackson es notable, no solo como artista, sino también como defensora del cambio y símbolo de fortaleza para aquellos enfrentados a problemas de salud mental.
Ha demostrado ser más que su nombre famoso; es una fuerza para el cambio social y una inspiración para todos nosotros.