stos panqueques están pensados para aquellas personas que no pueden consumir harina. Livianos, simples, riquísimos, vale la pena prepararlos y darse un gusto.
Además, les podés poner lo que quieras: desde dulce de leche, mantequilla de maní, mermelada o chocolate, todo le queda bien y los vuelve aun más sabrosos.
Si con todo este detalle, desperté tu interés y antojo, te comparto la receta para que puedas prepararlo y te salgan exquisitos.
Masa para panqueques con maicena: ¡Receta fácil y deliciosa!
Ingredients
- 1 huevo
- 120 gramos de maicena
- 250 cm 3 leche
- Manteca para evitar que se adhieran a la sartén o panquequera.
- Azúcar en polvo para espolvorear
Instructions
Son bien simples de realizar, solo te aconsejo que prestes especial atención al momento de cocinar la masa, así evitás quemarla.
Romper el ligue de los huevos en el bolw. Agregar de a poco la leche y una vez que estos ingredientes estén integrados, agregar la Maizena. Es importante que en la masa no haya grumos, para que se cocine de manera pareja y uniforme.
Dejar reposar por lo menos 1 hora en la heladera antes de empezar a cocinar los panqueques.
Luego que la masa haya reposado, calientan la sartén previamente al fuego medio y poner una porción pequeña de manteca hasta que se derrita.
Una vez que esto sucede, y cuidando que el calor no queme a la manteca líquida, bajar el fuego a mínimo y con la ayuda de un cucharón verte una pequeña porción en la sartén, previamente enmantecada.
La idea es que la preparación se distribuya completamente por toda la superficie de la sartén o panquequera y que cubra la base. Esperar a que haga los primeras «burbujas» y cuando esto sucede, recién hay que darlos vueltas para cocinar. Esas burbujas es la mejor señal para medir si están cocinados o no.
Repetir esta secuencia hasta que la preparación completa se termine y listo. Armar la torre de panqueques y ponerles el relleno que más les guste puede ser una opción divertida, ahora bien, si la idea es hacer algo un poco más gourmet, podés rellenar el panqueque apenas caliente con dulce de leche, enrollarlos y espolvorearlos con azúcar.
Una vez armado el rollito, aprovechar la temperatura de la sartén y cocinarlos apenas para dorar el grano de azúcar y sentir un gusto y la sensación crujiente en la boca del caramelo que se forma.